Martes 10 de junio de 1924. Portada del diario El Día. La publicación de José Batlle y Ordóñez, fue el único periódico que cubrió el campeonato mundial de fútbol, en la VIII Olimpiada, con un enviado especial. Lorenzo Batlle Berres, sobrino de Don Pepe, viajó como un integrante más de la delegación. Así comenzó la cobertura después de la sensacional victoria.
Argentina Association Football League: la primera fuera de Europa
El autor de la serie de notas relacionadas con los comienzos del fútbol en el Río de la Plata, conoció a Carlos Yametti hace unas cuentas décadas atrás. Un enamorado del fútbol, especialmente de su pasado, obsesionado por hurgar en el ayer, convencido que en los tiempos donde llegó la pelota a la Argentina, la difusión en los periódicos escritos en español era casi nula comparada con la que los diarios británicos que se editaban en Buenos Aires, destinaban al cricket, rugby y football associación, en ese orden.
Acompañado por una importante cantidad de amantes de la historia del fútbol, en noviembre de 1989 pusieron en marcha el Centro para la Investigación de la Historia del Fútbol (CIHF). Se potenció definitivamente como un grupo preocupado por la verdad histórica, en la asamblea llevada a cabo el 23 de noviembre de 2002 en la sede del Club Atlético Excursionistas de Buenos Aires, incorporándose coleccionistas, estadígrafos, cronistas e historiadores de otras ciudades argentinas.
Martes 10 de junio de 1924. Portada del diario El Día. La publicación de José Batlle y Ordóñez, fue el único periódico que cubrió el campeonato mundial de fútbol, en la VIII Olimpiada, con un enviado especial. Lorenzo Batlle Berres, sobrino de Don Pepe, viajó como un integrante más de la delegación. Así comenzó la cobertura después de la sensacional victoria.
¿Cuándo se fundó la Asociación del Fútbol Argentino?
No resulta fácil reconstruir la historia del football association en Buenos Aires.
Todos los destacados investigadores argentinos cuyos textos escritos hasta el final del siglo XX han sido consultados, mencionan el episodio del 9 de mayo de 1867 cuando un grupo de socios del Buenos Aires Cricket Club (BACC) fundaron el Buenos Aires Foot-Ball Club, siendo Tomas Hogg el principal impulsor de la idea y la reunión llevada a cabo en la calle Del Temple n.º 38, actual calle Viamonte y Reconquista.
Sin embargo, llegado el momento de establecer la fundación de la AFA, se advertía unanimidad denominando a Alejandro Watson Hutton como “padre del fútbol argentino” y la fecha del 21 de febrero de 1893, como la del nacimiento de la asociación. Similar criterio se expuso en la importante colección de cuatro tomos, “Historia del fútbol argentino”, editada en 1955 con la participación de los más importantes periodistas deportivos del momento: Ricardo Lorenzo (Borocotó), Fioravanti, Enzo Ardigó, Félix Daniel Frascara, Horacio Besio, Alejandro Yebra, Julio César Marini, Carlo de la Barga, Pedro Valdéz, A. Selsa Lozano, Damián Cané y Juan Fernández.
El reconocido historiador, Ernesto Escobar Bavio, en el libro de su autoría Alumni / cuna de campeones y escuela de hidalgía, editado en setiembre de 1953, recorre similar camino. Con respecto a éste periodista corresponde señalar que en 1923 en el libro El football en el Río de la Plata del cual también es autor, al mencionar los integrantes de la creada “Argentina Association Football League” el 21 de febrero de 1893, en la reunión en la casa de la calle Venezuela 1230, indica que se eligió presidente al Sr. Watson Hutton y Secretario al Sr. Lamont. En líneas anteriores escribe que “aquel grupo de caballeros británicos, con D. Alejandro Watson Hutton y Alec Lamont a la cabeza, vieron que sus esfuerzos no resultaban estériles”. La afirmación escrita, reitero, es de 1923 cuando aún estaban con vida los protagonistas de la etapa del fútbol heroico de Buenos Aires, y eran testigos presenciales de la verdadera historia.
Martes 10 de junio de 1924. Portada del diario El Día. La publicación de José Batlle y Ordóñez, fue el único periódico que cubrió el campeonato mundial de fútbol, en la VIII Olimpiada, con un enviado especial. Lorenzo Batlle Berres, sobrino de Don Pepe, viajó como un integrante más de la delegación. Así comenzó la cobertura después de la sensacional victoria.
Allá lejos en Londres
Los buques del Reino Unido que exportaron la Revolución Industrial por el mundo llevaron a cada puerto los deportes modernos que nacieron en sus islas. El cricket era el predilecto, considerado deporte nacional desde fines del siglo XVIII. Seguía el football rugby en orden de importancia y captación de cultores. El paso del tiempo fue transformando a este deporte en un juego demasiado violento, provocando lesiones de importancia y fracturas de extremidades.
El 26 de octubre de 1863, representantes de once instituciones de football rugby se reunieron en Fremason’s Tavern, en Great Queens Street de Londres. Preocupados por el grado de dureza mencionado escribieron nuevas reglas que disminuían la brutalidad del juego. Lo llamaron football association uniéndose en un organismo que identificaron con las dos primer letras del nuevo deporte. Así surgió la FA, sin incluir el nombre del Estado (Inglaterra) donde se creó.
Con sus particularidades propias los ingleses no se sólo se sintieron los dueños del juego que crearon. Lo siguen siendo. Todas las 211 asociaciones afiliadas actualmente a la FIFA, llevan el nombre del país. Con una excepción: la FA.
Martes 10 de junio de 1924. Portada del diario El Día. La publicación de José Batlle y Ordóñez, fue el único periódico que cubrió el campeonato mundial de fútbol, en la VIII Olimpiada, con un enviado especial. Lorenzo Batlle Berres, sobrino de Don Pepe, viajó como un integrante más de la delegación. Así comenzó la cobertura después de la sensacional victoria.
A partir de la presente nota se inicia la recopilación de los hechos que conforman el proceso fundacional de la Confederación Sudamericana de Football. Parte de los textos se incluyeron en el texto escrito por el autor, CONMEBOL 1916 -2016, Un continente de Fútbol, editado como libro oficial del organismo al cumplir los 100 años de su creación y puesta en marcha. Resulta interesante destacar e insistir, que se trató de un “proceso fundacional” que tuvo diferentes etapas y que culminó en las muy particulares reuniones de los dirigentes de Argentina, Uruguay, Chile y San Pablo y Río de Janeiro en representación de Brasil. Precisamente, esta presencia de un delegado del fútbol paulista y otro del carioca, determinó que el “proceso fundacional” no pudo cerrarse con la fundación del organismo en la reunión solemne realizada en la entonces sede de la Asociación Argentina de Football, el 9 de julio de 1916, al cumplirse el centenario de la independencia del país.
El autor inicia con esta nota la construcción de la historia del fútbol en el Río de la Plata, Chile y Brasil, así como los diferentes episodios que fueron acumulándose, frutos todos ellos de la vocación de poder y vanidad de los hombres que luchaban por posiciones de privilegio dentro de las clases altas de cada nación, donde el deporte, digamos el fútbol, se convirtió en una vía importante para construir poder y adquirir notoriedad en cada nación.
Martes 10 de junio de 1924. Portada del diario El Día. La publicación de José Batlle y Ordóñez, fue el único periódico que cubrió el campeonato mundial de fútbol, en la VIII Olimpiada, con un enviado especial. Lorenzo Batlle Berres, sobrino de Don Pepe, viajó como un integrante más de la delegación. Así comenzó la cobertura después de la sensacional victoria.
Corresponde dejar constancia de que los estimados historiadores compatriotas no se han detenido en el estudio de la importancia, la trascendencia que tuvo en su momento y la que adquirió, de cara al futuro, la resonante victoria lograda por Uruguay en la Copa América de Chile de 1920.
Para aquilatar su valor y sustentar lo expresado precedentemente, debe señalarse que la consagración de los celestes en la ciudad de Viña del Mar / Valparaíso, generó la tercera conmoción popular en Montevideo al llegar el vapor de la carrera a la dársena de Montevideo.
La primera explosión de júbilo colectivo en la capital del país se registró el 17 de julio de 1916, después del empate sin goles en la cancha de Racing de Avellaneda, que consagró a los celestes ganadores del primer campeonato sudamericano, cuando aún no estaba en juego la Copa América. Vamos a rescatar la prueba de lo afirmado.
Martes 10 de junio de 1924. Portada del diario El Día. La publicación de José Batlle y Ordóñez, fue el único periódico que cubrió el campeonato mundial de fútbol, en la VIII Olimpiada, con un enviado especial. Lorenzo Batlle Berres, sobrino de Don Pepe, viajó como un integrante más de la delegación. Así comenzó la cobertura después de la sensacional victoria.
En aquel fútbol glorioso de Uruguay, sin directores técnicos, ni preparadores físicos, sin ayudante del DT y el PF, sin entrenador de goles, sin podólogos, neurólogos, médicos y todos los ayudantes de hoy en día, la selección uruguaya la designaban y entrenaban… ¡Los dirigentes!
En cada ocasión se nombraba una “Comisión de Selección”, integrada por aquellos dirigentes de clubes de primera división que integraban la asamblea de la Asociación Uruguaya de Football, a cuyo cargo quedaba la tarea de elegir los jugadores y armar el equipo.
Martes 10 de junio de 1924. Portada del diario El Día. La publicación de José Batlle y Ordóñez, fue el único periódico que cubrió el campeonato mundial de fútbol, en la VIII Olimpiada, con un enviado especial. Lorenzo Batlle Berres, sobrino de Don Pepe, viajó como un integrante más de la delegación. Así comenzó la cobertura después de la sensacional victoria.
La delegación de Uruguay campeón de la Copa América de 1920 retornó a Montevideo en el vapor de la carrera, siendo recibida por una gran cantidad de aficionados que conmemoraban el éxito obtenido. Algunos allegados al Club Nacional de Football contaron que Héctor Scarone, al ver las manifestaciones de júbilo que se tributó a los uruguayos campeones, se arrepintió de la decisión que adoptó renunciando a integrar la selección. Consagrado muy joven en 1917 en el Parque Pereira con la celestes, en Valparaíso hubiera agregado el segundo título de campeón de América, a los que luego sumaría los de 1923, 1924 y 1926.
La pluma magistral de Diego Lucero, quién escribió en serie la vida de Héctor Scarone en el vespertino uruguayo Acción en 1967, reflejó de forma notable este episodio.
Martes 10 de junio de 1924. Portada del diario El Día. La publicación de José Batlle y Ordóñez, fue el único periódico que cubrió el campeonato mundial de fútbol, en la VIII Olimpiada, con un enviado especial. Lorenzo Batlle Berres, sobrino de Don Pepe, viajó como un integrante más de la delegación. Así comenzó la cobertura después de la sensacional victoria.
En la nota anterior se dejó constancia de la unión de los dirigentes de la oficial Asociación Argentina de Football con los delegados del fútbol de Brasil, representando a la Liga Metropolitana de Football de Río de Janeiro, fundada el 8 de julio de 1905. Los cariocas estaban enfrentados con los paulistas, cuyos dirigentes reclamaban la paternidad de ser los primeros en jugar al football en Brasil y poner en marcha la primera asociación de este deporte en el país.
Martes 10 de junio de 1924. Portada del diario El Día. La publicación de José Batlle y Ordóñez, fue el único periódico que cubrió el campeonato mundial de fútbol, en la VIII Olimpiada, con un enviado especial. Lorenzo Batlle Berres, sobrino de Don Pepe, viajó como un integrante más de la delegación. Así comenzó la cobertura después de la sensacional victoria.
Situación argentina y congreso de la CSF
En la Copa América de 1920 disputada en Santiago de Chile, se produjo un episodio de enorme importancia en la corta vida de la Confederación Sudamericana de Football. Episodio que ha sido pasado por alto por aquellos que se inclinan al estudio de la historia del organismo. Con el fútbol argentino dividido desde el 22 de setiembre de 1919, el presidente Federico Luzio que sustituyó al Dr. Ricardo Aldao en la conducción de la oficial Asociación Argentina de Football, pergeñó un plan destinado a destruir las acciones que desarrollaba la disidente Asociación Amateurs a cuyo frente figuraba la prestigiosa figura del Dr. Beccar Varela.
Los hechos producidos después del cisma, marcaron el acierto de las decisiones adoptadas por “los amateurs” quienes abrieron las puertas del fútbol del interior de Argentina a la capital. Esta determinación generó para los disidentes, una firme posición superior a la asociación oficial. Superior en cantidad de clubes, en concurrencia de espectadores a las canchas y en el furor que significó en el interior del país, recibir la visita de los clubes importantes afiliados a los amateurs, durante la disputa del llamado campeonato descentralizado.
Martes 10 de junio de 1924. Portada del diario El Día. La publicación de José Batlle y Ordóñez, fue el único periódico que cubrió el campeonato mundial de fútbol, en la VIII Olimpiada, con un enviado especial. Lorenzo Batlle Berres, sobrino de Don Pepe, viajó como un integrante más de la delegación. Así comenzó la cobertura después de la sensacional victoria.
Una de las primeras decisiones que adoptó el Dr. Julio María Sosa desde la presidencia del Club Atlético Peñarol, consistió en asumir la delegación de la institución en la Asociación Uruguaya de Football. Político por excelencia, con la idea fija de llegar a presidente de la República en las elecciones de 1922 o 1926 por el Partido Colorado, al que pertenecía, previendo que su participación en la AUF aumentaría su exposición pública.
El 22 de setiembre de 1919 por segunda vez en su historia, el fútbol argentino se dividió. Ese día se fundó la Asociación Amateurs de Football bajo la presidencia del Dr. Juan Mignaburu de Independiente. Permaneció vigente, afiliada a la FIFA, la oficial Asociación Argentina de Football, cuyo líder y conductor era una figura de enorme fuerza en la alta sociedad de Buenos Aires: el Dr. Ricardo Aldao, de Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires (GEBA). Días después de iniciado el conflicto separatista, presentó renuncia al cargo. Asumió el mismo el Dr. Federico Luzio del entonces fuerte club Porteño.
Con la escisión del fútbol argentino en marcha, la asamblea de la Asociación Uruguaya de Football, intervino sin éxito en la búsqueda de una solución entre las partes.