El Estadio Centenario, monumento del fútbol mundial

No fue hace mucho tiempo cuando se comenzó a darle la importancia que realmente merece el mítico Estadio Centenario. En los últimos años fue incluido en tours turísticos, se colocó un ascensor en la Torre de los Homenajes, se mejoró el Museo del Fútbol y muchas cosas más que le dieron al coloso de cemento el valor que le corresponde.

Muy poca gente sabe que la FIFA nombró al escenario como Monumento del Fútbol Mundial. El hecho se produjo el 18 de Julio de 1983 (fecha de cumpleaños del estadio) bajo la presidencia del brasileño Joao Havelange.

El Estadio Centenario fue inaugurado un 18 de Julio pero de 1930 para la primera Copa del Mundo que se desarrolló en Uruguay (cabe señalar en esa época se considera como mundiales al campeonato de fútbol que se disputaba en los Juegos Olímpicos, los cuales se sumaron al evento en 1924).

El primer partido del Mundial fue entre Uruguay y Perú por la serie que también integró Rumania. El resultado fue 1-0 a favor de la celeste con un gol convertido por el delantero tricolor Héctor “Manco” Castro sobre el arco de la Tribuna Colombes a los 60′.

Los nombres asignados a las cabeceras del estadio fueron en conmemoración de los dos Juegos Olímpicos obtenidos en 1924 (Ámsterdam) y 1928 (Colombes). Las otras dos tribunas fueron nombradas “América”, por el continente, y “Olímpica”, por las vueltas olímpicas que había dado la selección hasta aquel momento. Esta tribuna pudo haberse llamado “Tribuna Montevideo” pero el nombre fue descartado.

Existe una leyenda de la época en la que, cuando el Mundial finalizó, el estadio fue ofrecido a Peñarol (Nacional no fue tenido en cuenta debido a que ya contaba con el Gran Parque Central) pero las autoridades aurinegras rechazaron la propuesta alegando la institución construiría el suyo.

A modo de bautismo tras el homenaje de “Monumento del Fútbol Mundial” otorgado por la FIFA, se volvió a jugar el partido de 1930 entre Uruguay y Perú que en esta ocasión finalizó 1-1. El árbitro del partido fue Claudio Busca y el gol celeste fue anotado por Arsenio Luzardo.

Bajo la conducción técnica de Omar Borrás, Uruguay formo con Rodolfo Rodríguez, Raúl Esnal, Nelson Gutierrez, Nestor Montelongo, Nelson Agresta (Mario Saralegui), Washington González, Wilmar Cabrera, Jorge Barrios, Fernando Morena, Víctor Rabuñal (Arsenio Luzardo) y Luis Acosta (Carlos Aguilera).

El Estadio Centenario es testigo de varias vueltas olímpicas uruguayas entre las que se encuentran la Copa América de 1942, 1956, 1967 y 1995, el certamen continental Juvenil sub 20 de 1979 y la Copa de Oro de 1981.

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